Maracaibo — Un arreglo por un problema suscitado entre dos menores de edad, terminó en desgracia, luego de que Rangel Nava, un obrero de 51 años de edad, muriera al recibir un palazo en la cabeza. El hecho se registró a las 11:00 de la noche en el barrio Las Tres S, de la parroquia San Isidro, en Maracaibo.
Se conoció que días antes dos niños menores de edad y de etnia Wayúu habían tenido un altercado y que uno de los niños, sobrino de Nava, le dio una pedrada al otro, por lo que la familia del niño golpeado fue hasta la residencia de los Nava para arreglar el problema, siguiendo la tradición wayúu.
Trascendió que la familia recibió la cantidad de 7 mil bolívares, pero algunos de los parientes no quedaron conformes, y al discutir por el dinero recibido, se generó una pelea entre los mismos, quienes al parecer se encontraban bajo la influencia de bebidas alcohólicas. Se conoció que Nava murió al tratar de impedir que los ocho hombres y tres mujeres de la familia del niño agredido se llevaran unos ovejos de la abuela del niño agresor.
Según contó un pariente de Nava, un hombre, pariente del niño agresor, le dio una cachetada a una mujer, pariente del niño agredido, por lo que la mujer respondió el golpe, pero en vez de utilizar la mano le dio un «cotizazo» en la cara.
Asimismo, se supo que los implicados en la muerte del hombre ya se encuentran identificados.
Funcionarios del CICPC llegaron al lugar para levantar el cuerpo de la víctima y lo trasladó hasta la medicatura forense.
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