Familiares presumen que se trató de un robo que salió mal ya que algunas de sus pertenencias no estaban con él
Foto: Génesis Rosario
El joven se encontraba frente a la licorería El Beiker cuando fue sorprendido por dos antisociales quienes acabaron con su vida
La Concepción — A las 10:15 de la noche del domingo fue ultimado de siete impactos de bala, Johendry Eduardo Marín Acosta, de 23 años edad, cuando se encontraba reunido con unos amigos frente a la licorería El Beiker. El hecho se registró vía La Concepción, en el sector Paraíso.
Marín Acosta era el mayor de tres hermanos, estaba casado y dejó dos hijos en orfandad. Era obrero, pero «se ayudaba haciendo marañitas» de vez en cuando. En la actualidad su padre lo ayudaba ya que estaba desempleado, relató la suegra del occiso.
¿Robo o ajuste de cuentas?
Familiares del hoy occiso explicaron que desconocen las causas del asesinato pero indicaron que posiblemente se trate de un robo que salió mal, ya que el joven tenía dos teléfonos móviles y ninguno de los dos apareció.
De igual forma se conoció que mientras Marín estaba pasando el rato frente al establecimiento fue sorprendido por dos sujetos quienes, al parecer, llegaron a bordo de una moto y sin mediar palabra comenzaron a disparar en su contra.
Marín fue trasladado al Hospital José María Vargas, de La Concepción, pero ingresó sin signos vitales.
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