La persona que comete una violación ha sido violada, bien sea desde niño, en su etapa de adolescencia o adultez, según explican los psicólogos y especialistas
Foto: Wilmer Cubillán
Maracaibo — ¿Qué pasa por la mente de un violador y posterior homicida?, ¿Cuáles son las causas que lo lleven a violar y matar? ¿Qué pasa por la mente de estos pedófilos asesinos?, éstas serían una de las interrogantes más constantes que una persona en su sano juicio se preguntaría. ¿Por qué ensañarse contra un niño?, un ángel de Dios lleno de inocencia sin pistas de malicia.
Para la licenciada en trabajo social tratante egresada de la Universidad del Zulia (LUZ), Flor Durán, ex trabajadora de la cárcel nacional de Maracaibo en materia de reeducación y quien trató bastante cerca al violador más temido de la región zuliana durante el año 2006, el perfil del atacante tiene mucho que ver con el consumo de sustancias estupefacientes, la promiscuidad, la convivencia en viviendas unifamiliares en donde los niños se encuentran expuestos a presenciar relaciones sexuales y en muchos casos son abusados sexualmente en reiteradas oportunidades o expuestos a acciones lascivas entre los miembros de su familia.
Otros factores
Otro de los factores que van formando el perfil de este tipo de sujetos es la ociosidad en casa, el no dedicarse al estudio, el deporte o alguna actividad laboral.
Por su parte, el psicólogo y psiquiatra, Fernando Castro, quien es médico tratante en la clínica del sueño manifestó que resultaría difícil, incluso para un experto, reconocer en primera instancia a un violador y posible homicida, mayormente cuando la persona sufre de doble personalidad.
Sin embargo, existen varias alertas que se podrían tomar en cuenta. Una vida llena de maltratos desde la infancia, agresividad constante, ira repetitiva, odio por todo y por todos, son algunas características que podrían tomarse en cuenta para identificar a un violador.
«Resulta difícil en pocos casos hasta para un experto reconocer a un violador y posible homicida», resaltó el especialista.
Violación y homicidio
Aunando al delito de violación se suma el de acto seguido convertirse en homicida. Castro asegura que existen dos razones potenciales para que luego de la violación se realice el asesinato. La primera de ellas saber que este tipo de delito es sancionado y el atacante silencia a la víctima para evitar ser privado de su libertad.
La segunda, es que la persona sufre de un trastorno de personalidad puesto que no se somete a las reglas y normas de la sociedad.
El doctor Michael Stone, psiquiatra forense muy reconocido y quien ha sabido explicar a través de años de estudios los 22 niveles de maldad en este tipo de casos. Este sistema de clasificación se basa tanto en factores de personalidad como también en las características específicas de los crímenes cometidos.
Vale resaltar que la maldad se evidencia precisamente en los detalles: planeamiento, crueldad, tortura, abusos sexuales, sadismo y presencia de psicopatía. A mayor presencia de estas características, más malvado el criminal. Explica Stone.
Nivel 17
«Asesinos seriales perversos y torturadores-asesinos, aunque su finalidad principal es la violación pues el homicidio posterior es con el propósito de que la víctima no lo denuncie», resalta el nivel 17 de los 22 que expone Stone.
En este nivel podrían ubicarse los violadores y asesinos de los siete inocentes que han perdido la vida en lo que va de 2016. En cuatro de los casos los agresores han sido los padrastros de los menores de edad y en dos de ellos las madres de los infantes han tenido conocimiento del hecho. Aquí influirían otro tipo de factores como el socioeconómico, educativo, entre otros.
Perfil difícil
En resumen, el perfil de un violador y asesino no es fácil de reconocer por personas comunes, incluso en varios casos resulta difícil también para un experto en el tema, sin embargo, existen varias características que podrían encender las alarmas de los padres o representantes de los menores.
Cuidado con las personas agresivas, maltratadas y maltratadoras, resentidas con la sociedad o con su familia pues podrían estar en presencia de un violador o asesino en potencia.
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