La piscina donde el niño pereció por inmersión
Foto: Agencias
En medio de un descuido de sus padres, Élida Osorio (26) y William González (30), el pequeño Miguel González, como lo identificaron sus dolientes, se habría sumergido en la piscina de menor profundidad, la cual contenía agua a bajo nivel, ya que, al parecer, no estaba habilitada.
Maracaibo — Un bebé de 23 meses de nacido murió ahogado este domingo en una piscina que permanecía «en desuso» dentro de la granja privada Papiotón, ubicada en el sector Los Bucares, en Maracaibo.
En medio de un descuido de sus padres, Élida Osorio (26) y William González (30), el pequeño Miguel González, como lo identificaron sus dolientes, se habría sumergido en la piscina de menor profundidad, la cual contenía agua a bajo nivel, ya que, al parecer, no estaba habilitada.
Sin embargo, el niño no logró mantenerse por encima de las aguas, por lo cual falleció por inmersión a los pocos minutos, según alegaron fuentes allegadas al suceso. Al notar la ausencia de la criatura, sus progenitores se aproximaron a la piscina, hallando el cuerpecito asfixiado.
Con ayuda de los residentes de una granja adyacente, el niño fue llevado al Hospital Materno del sector Cuatricentenario, donde ingresó sin signos vitales.
Estaba de visita
La familia, oriunda de Colombia, se encontraba de visita a un pariente que funge como encargado de las instalaciones, ubicadas cerca del estadio del Unión Atlético Maracaibo. Al parecer, se residenciaban en una casa en la C-3. Este domingo salieron con planes de disfrutar en familia.
Miguel era el menor de tres hermanos. El CICPC- Zulia investiga el caso.
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