Deudos de Orlando hablaron en el funeral

«A mi sobrino lo asesinaron por líos de faldas»

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14 de febrero, 2017 - 10:59 am
Wilson Alvarado / [email protected]

Orlando fue sepultado ayer a la 1:00 de la tarde en el cementerio Jardines de La Chinita

Foto: Wilson Alvarado

Maracaibo — Llena de rabia y dolor, Carmen Godoy, tía de Orlando Emiro Rivero Bastidas (20), manifestó sin titubeo, ni temor alguno sobre el féretro donde descansaba el cuerpo de su sobrino «que a Orlando lo asesinaron por líos de faldas».

La mujer con voz entrecortada y una mirada perdida entre los presentes que despidieron, ayer, al joven en la funeraria San Alfonso, reveló mientras sus lágrimas se esparcían por su rostro «que su sobrino era muy mujeriego, amante de las parrandas nocturnas y de los tragos entre amigos».

Carmen y el resto de la familia no manejan otro móvil criminal para la muerte de su sobrino, quien fue asesinado la madrugada del domingo.
La fémina indicó desconocer si Orlando andaba esa noche con una mujer comprometida dentro del vehículo o había tenido algún problema anteriormente por andar con mujeres ajenas que haya desencadenado alguna «culebra».

Rivero fue sorprendido a escasas cuadras de la discoteca Setbar, ubicada en la avenida Delicias, cuando se trasladaba a bordo de su vehículo Kía, modelo Río, color azul, placas AE623DV en compañía de su amigo Júnior Balzan (21), y cinco mujeres con quienes rumbeó toda la noche. De pronto fueron interceptados, según fuentes policiales, por una camioneta Explorer, color roja, la cual les truncó el camino. De la unidad descendió un sujeto, a quienes testigos describieron de contextura gruesa y barbudo, quien disparó en reiteradas ocasiones sobre la humanidad de Orlando.

El agresor luego de cometer el crimen agarró por los pelos a una de las damas y se la llevó con rumbo desconocido.

En el tiroteo Najin Ceruzzi González (19), Douglimar García Roque (20), y una adolescente de 14, resultaron heridas, por lo que se encuentran luchando por su vida en el Hospital Universitario de Maracaibo (HUM).

A pesar del testimonio de los familiares, detectives de la policía científica indagan entre los círculos familiares y sociales del joven para determinar las causas del crimen y capturar a los responsables.

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