Maracaibo — Más de 150 trabajadores del barrido manual, conocidos como «salserines» se negaron desde este miércoles a cumplir con sus funciones correspondientes a la limpieza de la ciudad.
El director del Instituto Municipal de Ambiente (IMA), Juan Pablo Lombardi, alertó sobre la intempestiva medida y argumentó que no existe ninguna razón para justificar tal paralización de actividades por parte de los trabajadores, ya que la alcaldesa Eveling de Rosales, ha honrado todos los compromisos laborales.
Asimismo, Lombardi alertó a la opinión pública sobre «un posible ingrediente político dentro de esta medida tomada por algunos trabajadores para sabotear el desarrollo de las operaciones que finalmente no dañan a la Alcaldesa, sino al ciudadano común».
De manera que el funcionario municipal expresó que «los invitamos a dialogar con nosotros», y además aseguró ver con extrañeza que «el diputado Eduardo Labrador y la concejala Egda Vílchez, se hicieran presentes en la sede del Funsama para impedir que los trabajadores salieran a cumplir con sus funciones».
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