Tras el problema suscitado con el Metro de Maracaibo cientos de ciudadanos se vieron afectados por la denominada hora pico. Exigieron mejoras para el establecimiento
Fotos: Nohelis Dávila/Jennifer Borrego
Maracaibo — Alrededor de las 7:40 de la mañana de este miércoles, el Metro de Maracaibo dejó de funcionar de forma regular, hecho que generó por casi una hora el colapso en las diversas paradas que funcionan para este medio de transporte, iniciando desde la parada Altos de La Venega hasta la estación Libertador, ubicada en el casco central.
Trabajadores del Metro de Maracaibo explicaron que la irregularidad se presentó por el nuevo sistema de cambio de vías que no acoplaba la calzada norte (encargada de abrir y cerrar el paso de la vía férrea para que el tren pueda desviarse), la cual tendría que ser modificada de forma manual, pero los trabajadores se negaron a realizar el trabajo por el riesgo que corrían sus vidas.
Desde el lugar, Adrián Barrios, operador del Metro de Maracaibo, indicó que el problema presentado generó grandes dificultades por la hora pico, sin embargo, habían habilitado 30 buses del Metromara, para el traslado de los usuarios afectados por la situación. «Hay muchas dificultades, sobre todo porque es la hora cuando todas las personas van a sus trabajos, clases o a realizar cualquier diligencia personal, y con este inconveniente muchos llegarán tarde a sus compromisos, sin embargo, en la medida de lo posible estamos resolviendo con los 30 buses de Metromara».
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A pesar de la alternativa presentada por la empresa de transporte, según algunos demorada, la euforia, molestia y angustia en los usuarios que a diario utilizan el servicio ferrovial, fue más que visible, calificándolo de «ineficiente y poco efectivo, considerando que aplicaron el plan de contingencia cerca de las 9:00 de la mañana».
La desesperación de los usuarios, al verse formando una cola de casi mil personas a la espera de la salida de los buses (que fueron gratuitos por las molestias causadas), provocó que algunos optaran por tomar el transporte publico para acelerar la llegada a su destino.
Sin embargo, nunca faltan los trabajadores del volante que aprovechan la crisis de los demás, para «resolverse» el bolsillo. Buses, microbuses y carrito por puesto, no dudaron en brindarle el «apoyo» a quienes iban retrasados a sus compromisos, pero a quien se iba montando en las unidades le aclaraban que «el costo del pasaje es de Bs. 250 desde Altos de La Vanega solo hasta la estación Libertador».
«Qué mal te veo»
QUÉ PASA conversó con algunos supervisores del Metro de Maracaibo para conocer sus impresiones sobre las constantes irregularidades que desde hace algunos meses se han estado presentando en las rutas terrestres y ferroviales. En tal sentido, una vez más al preguntarles en relación al tema, éstos deciden declarar en anonimato (para cuidar su empleo).
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«Sin duda alguna cuando arrancó sus funciones el Metro brindaba buenos servicios. En un solo viaje atendemos alrededor de 300 personas, pero con el pasar de los meses, han sido muchas las dificultades que se han presentado y a medida de lo que se puede, intentamos resolver», manifestó un supervisor de la empresa. Cabe destacar que para las 11:00 de la mañana de ayer, el servicio de trenes se había restablecido.
Buses de Metromara brindando apoyo al Metro de Maracaibo
José Villalobos: «Es una pérdida de tiempo, sobre todo para quienes tenemos que trabajar o hacer diligencias. Cómo se le explica esto a los jefes».
Duglas Morales: «Perdí el chequeo de mi vista. Es una situación muy difícil; en vez de resolver los problemas que se les presentan, cada día empeoran más. Sacaron muy tarde los buses».
Gliseth Piña: «Siempre debo ir al centro y me toca tomar el Metro, pero esta situación es grave porque nos afecta a todos. Como dicen por allí, todo al principio es bello».
Jesús Parra: «El Metro últimamente está presentando muchas fallas. Somos personas que nos beneficiamos del servicio, pero para nadie es un secreto que cada día trabajan con más deficiencia».
María Rincón: «Necesitaba llegar rápido a mi destino, ahora me toca ver cómo resuelvo. No tenían un plan de emergencia a pesar de que sabían que esto podía pasarle al tren en cualquier momento».
Extensa cola realizada por los usuarios esperando la habilitación de los buses para poder llegar a sus destinos
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