Foto: Agencias
Los miembros de la Mesa de la Unidad Democrática insisten en la reunión con los testigos internacionales de buena fe
Caracas — Al mediodía de ayer se conoció que no vendrían a Venezuela el canciller brasileño, Luiz Alberto Figueiredo, su homóloga colombiana María Ángela Holguín y Ricardo Patiño, ministro de Exterior de Ecuador, quienes son los representantes de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), y participan en las conversaciones con el Gobierno en calidad de testigos de buena fe y a quienes esparaban los miembros de la Mesa de la Unidad (MUD), para reunirse con ellos y tratar el tema de la suspensión de las mesas de diálogo.
Por tal razón y ante la sensación de incertidumbre que dejó la noticia, Ramón José Medina, coordinador en las conversaciones de la MUD, afirmó que la reunión se habría pospuesto para el domingó.
Lo que esperan
«Aspiramos a que los cancilleres y el nuncio apostólico, representante de la Iglesia católica, en su condición de mediadores, hagan ver al Gobierno que, si tiene interés en que el diálogo prospere, hay que tomar decisiones y hay que cambiar la actitud», dijo Medina.
En vista de que el canciller Figueiredo no podía venir y el canciller Patiño no podía el lunes, se escogió el domingo para que esten los tres cancilleres y el nuncio que para nosotros es indispensable», explicó Medina.
Asimismo, la MUD canceló su participación en las mesas de dialogo por considerar que esta semana que las conversaciones están «en crisis» por la falta de respuestas por parte del oficialismo y anunció que no participará en nuevas reuniones hasta que se produzca un «gesto» por parte del Gobierno que preside Nicolás Maduro.
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