Cuerpos de seguridad aseguraron que falleció porque le dispararon una metra, mientras sus parientes dicen que recibió tres impactos de bala
Maracaibo — «¡Dios mío no! ¡Mi hijo!… Eran los gritos desgarradores de Yusmaira Bravo, madre de Adrián José Duque Bravo (23), quien junto a un grupo de parientes esperaba la entrega de su cuerpo en las afueras de la morgue de LUZ, ayer en horas de la mañana.
El joven, como se recordará, falleció la noche del miércoles producto de las acciones violentas que se desarrollaban en las Torres del Saladillo, tras recibir un disparo en el tórax.
Una de sus hermanas, con lágrimas en su rostro, declaró que fue una sorpresa para ellos cuando se enteraron de lo ocurrido ese día, «un amigo de Adrián fue hasta la casa y nos avisó que él estaba herido en el Hospital Chiquinquirá, teníamos la esperanza de encontrarlo vivo, pero no fue así», acotó.
La doliente además dijo que desconocían que él se encontraba en las manifestaciones pues pensaban que estaba trabajando, «después nos enteramos que había salido de su trabajo cerca de la 1:00 pm porque pidió permiso para sumarse a las protestas», refirió.
«Él solo quería luchar, quería ver un cambio en su país», acotó.
Tres representantes de la Fiscalía 4ta del Ministerio Público se hicieron presentes a tempranas horas de este jueves en la morgue de la Facultad de Medicina de LUZ, donde entrevistaron a algunos de los allegados al joven fallecido, como parte de las órdenes emanadas por la superioridad de este organismo para resolver el caso.
Los dolientes afirmaron que su deudo recibió tres impactos de bala, según el informe de la necropsia que le realizaron.
Ayer en horas de la tarde, el féretro donde reposaban los restos del joven contador público, fue expuesto en medio de la sala de su vivienda, ubicada en el sector Haticos II, detrás del Hospital General del Sur, donde vivía con su mamá y sus hermanas.
Decenas de personas se acercaron hasta el hogar materno de «El Catire», como cariñosamente lo llamaban, para dar sus condolencias a su familia.
Se conoció que hoy sería llevado a su última morada en el cementerio Jardines La Chinita.
En torno al caso de Adrián, se pronunciaron varios representantes de los organismos de seguridad.
El director de la Redi occidente, Tito Urbano Meleán, indicó que el joven falleció debido a que le dispararon una metra que quedó alojada en su tórax, versión que coincide con lo expuesto por el secretario de Seguridad y Orden Público, Biagio Parisi, quien además agregó que el disparo fue hecho con «un arma de fuego de fabricación casera, conocida como chopo», información que fue repudiada por la familia de Adrián.
Ante la muerte del joven varias casas de estudios superiores como Urbe y Unica, emitieron un comunicado expresando su rechazo a lo sucedido y en las redes sociales los comentarios de indignación por el hecho tampoco se hicieron esperar, «no más jóvenes muertos», expresaban los usuarios de Instagram.
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