San Francisco — La escuela Venancio de Jesús Duarte, dependiente del Ejecutivo regional, espera por una jornada de limpieza y fumigación para combatir los vectores transmisores del dengue y chikungunya.
La espesa maleza que rodea el plantel, ubicado en la avenida 200 de la parroquia José Domingo Rus del municipio San Francisco es un foco latente de contaminación, sobre todo con las lluvias suscitadas recientemente.
Elizabeth Moreno, sub-directora del plantel, aseguró que hace más de dos semanas elevaron un informe al Municipio Escolar para solicitar la abatización y nebulización de los espacios, pero aún no han recibido respuestas.
Destacó que los 484 niños en edad preescolar hasta los que cursan sexto grado están expuestos a contraer las enfermedades, de hecho, comentó que tres niños y tres docentes de la escuela se encuentran suspendidos por dengue.
La vocera de la institución pidió asistencia al Gobierno local para acondicionar y optimizar varias áreas del plantel que se encuentran deterioradas y otras que no funcionan, como por ejemplo la cava donde se guardan los alimentos y los baños. Igualmente, hicieron un llamado a los cuerpos de seguridad para que cumplan con el patrullaje escolar, puesto a la institución nunca ha llegado este programa y consecutivamente son víctimas del hampa.
«Nos han dejado sin aires, se nos llevaron las llaves de las tuberías, los bombillos, equipos de oficina. Ya no sabemos qué hacer, estamos a la buena de Dios. Esa policía escolar es pura mentira, eso no existe», dijo la docente.
Fotos: Carmen Salazar
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