Los padres exigen a las autoridades que encuentren con vida a los 43 jóvenes cuyo paradero se desconoce desde la noche del 26-S.
México — El presidente de México, Enrique Peña Nieto, recibió ayer por primera vez a familiares de los 43 jóvenes desaparecidos hace más de un mes en unos ataques de policías y sicarios del narcotráfico en Iguala (Guerrero, sur). El encuentro se celebró a puerta cerrada.
Las familias de los jóvenes habían sostenido antes encuentros con otros miembros del gabinete, como el secretario (ministro) de Gobernación Miguel Ángel Osorio Chong y el fiscal general Jesús Murillo Karam.
Peña Nieto, presionado desde el exterior con reclamos de organismos como la ONU, se ha comprometido a esclarecer este caso y castigar a todos los responsables.
Los padres exigen a las autoridades que encuentren con vida a los 43 jóvenes cuyo paradero se desconoce desde la noche del 26 de septiembre y que siguen siendo buscados por tierra, agua y aire por un fuerte operativo del gobierno federal.
Los jóvenes, alumnos de una escuela rural para maestros de la cercana Ayotzinapa, fueron víctimas de ataques por parte de policías de Iguala y sicarios del cártel «Guerreros Unidos».
El Papa habló
Por su parte, el papa Francisco rindió homenaje ayer a los 43 estudiantes. «Quisiera elevar una oración y traer cerca de nuestro corazón al pueblo mexicano, que sufre por la desaparición de sus estudiantes y por tantos problemas parecidos. Que nuestro corazón de hermanos esté cerca de ellos orando en este momento», dijo en español.
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