Santiago — Los estudiantes chilenos siguen su batalla y salieron de nuevo este jueves a las calles para mostrar su descontento con la reforma educativa del gobierno de Michelle Bachelet, que consideran insuficiente para lograr gratuidad y calidad. Miles de estudiantes —80.000 según el movimiento estudiantil— caminaron por la céntrica avenida Alameda de Santiago exigiendo que se escuche su voz en las reformas, que sean mucho más profundas y que el gobierno no ceda ante las presiones de los sectores interesados. La marcha transcurrió en un ambiente festivo y pacífico, vigilada de cerca por un cinturón de la policía.
Al finalizar el recorrido, un centenar de encapuchados se enfrentaron a la policía tirándoles piedras y pintura, y fueron repelidos con gas lacrimógeno y carros antimotines.
Comente