En un comunicado emitido el lunes, el Comando para África de las fuerzas armadas de Estados Unidos indicó que llevó a cabo cuatro ataques el 15 de diciembre en los que murieron 34 personas, y otros dos el 16 de diciembre en los que fallecieron 28. Todos los bombardeos fueron efectuados en el área costera de Gandarshe al sur de la capital Mogadiscio, señaló.
Los ataques no dejaron civiles muertos ni heridos, agregó.
Los seis bombardeos fueron efectuados en forma coordinada con el gobierno de Somalia, señaló. Se llevaron a cabo para “prevenir que al-Shabab utilice las áreas remotas como un sitio seguro para planear, dirigir, inspirar y reclutar personas para ataques futuros”, agregó.
Al-Shabab utiliza partes del sur y el centro de Somalia para orquestar y dirigir ataques extremistas, robar ayuda humanitaria, extorsionar a la población local para financiar sus operaciones y dar albergue a radicales, se afirma en el comunicado.
Con estos bombardeos, las fuerzas armadas de Estados Unidos han efectuado al menos 46 ataques aéreos este año contra al-Shabab, que está aliado con al Qaeda y el grupo extremista islámico más activo de África. Al-Shabab controla partes del sur y el centro de Somalia y sigue escenificando atentados letales en Mogadiscio y en otras ciudades.
Los bombardeos estadounidenses han aumentado drásticamente desde que el presidente Donald Trump asumió el puesto y aprobó ampliar las operaciones militares en esta nación del Cuerno de África. En los ataques también se pretende alcanzar a otros combatientes vinculados al grupo Estado Islámico, los cuales no son muchos en la zona.
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