Foto: AFP
El Cairo — Un tribunal egipcio condenó ayer al expresidente Hosni Mubarak, expulsado del poder por una revuelta en 2011, y a sus dos hijos a tres años de cárcel por la malversación del equivalente de más de 10 millones de euros.
Mubarak ya había sido condenado a tres años de prisión pero la corte de casación había anulado en enero la sentencia y ordenado un nuevo juicio.
Y es que el expresidente en teoría es libre, al igual que sus hijos, desde enero, debido a que han cumplido el máximo de prisión preventiva establecido por ley. Se desconoce si, tras la audiencia de este sábado, volverán a ser detenidos, y si esta nueva condena, que puede ser apelada, quedaría cubierta por la prisión preventiva cumplida.
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