Bagdad — Cincuenta reos y 12 policías murieron tras un motín organizado por miembros del Estado Islámico (EI) en una prisión ubicada al noreste de la capital iraquí.
Después de que estallara el motín, decenas de presos se escaparon del penal Al-Khalis, a unos 80 kilómetros al noreste de Bagdad.
Milicianos del EI usaron explosivos para liberar a 30 presos y entrar en los almacenes de armas de la cárcel.
«EI fue responsable de las muertes y liberación de sus prisioneros», dijo el Al-Oudi Khadran.
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