El ministro de Defensa de Colombia, Guillermo Botero, lamentó el atentado ocurrido este jueves en la Escuela de Cadetes de la Policía General Santander, e indicó que se trató de «un acto terrorista cometido por el ELN» el cual cegó esas vidas.
Botero comunicó que el presidente, Iván Duque, junto con todas las fuerzas militares, la Fiscalía General de la Nación, el procurador general de la nación, los altos mandos militares, y la junta de inteligencia conjunta, se reunieron para tratar de establecer todo lo ocurrido. «En un tiempo récord de 22 horas le podemos informar al país con claridad y con certeza qué fue lo que ocurrió».
La camioneta implicada fue un Nissan, modelo 1993, de placas LAF565 con blindaje 2.5. «La transacción del vehículo se hizo el 11 de mayo del año 2018» pero aseguran tener información de que la compra – venta «se realizó antes, posiblemente dos o tres meses de anticipación», y que se perfeccionó algunos meses después.
«Quiere decir que esta es una operación que se estaba planeando desde hace más de 10 meses, y eso tiene un inmenso valor probatorio desde el punto de vista de los autores intelectuales, porque el autor material ya fue plenamente identificado, además dactilarmente», confesó Botero.
El ministro de Defensa explicó: «Esta persona aprovecha la apertura de una puerta que es usada exclusivamente para vehículos de carga, para entrar camiones pesados y algunos otros elementos, y aprovecha la sacada de unas motos, y a toda velocidad ingresa a la Escuela de Cadetes, sin respetar a los guardias de seguridad, quienes inmediatamente frente al hecho comienzan a avisar a los demás guardias que hay dentro de toda la institución. Aquí no hubo perros como se dijo, ningún perro fue muerto. El único perro que había que puede detectar explosivos estaba en la puerta principal de la Escuela General Santander».
Agregó que el sujeto «es abordado por un oficial de seguridad que ya estaba notificado por radio (…) en ese momento el echa reversa, se devuelve y el vehículo explota frente a un dormitorio primordialmente de mujeres».
¿Quién es el autor material?
El señor José Aldemar Rojas Rodríguez alías «el mocho» o «quico» es el autor material del atentado. Botero señaló que se ha podido establecer que entre el año 2008 y 2010 como explosivista perdió su mano derecha, de allí ese apelativo de mocho.
Nació en Puerto Boyacá en 1962, y desde 1994 se desempeñó como miliciano del ELN en Pueblo Nuevo, Arauca. Estuvo como cabecilla de este grupo delictivo, en varias oportunidades en algunos frentes y claramente hizo parte del Frente Domingo Laín Sáenz.
Posteriormente en 2003 se convirtió en cabecilla, explosivista e instructor del frente Adonay Ardila del ELN.
En 2011 continuó siendo instructor de «cursos especialistas» en Fortul, Arauca, con desplazamientos desde esa época a Venezuela a enseñar a miembros del ELN que estuvieran en ese país, y a otras personas enseñarles el manejo de explosivos.
En 2012 aparece en el orden de batalla del Frente Domingo Laín como enlace directo de alias «Culebro Viejo», cabecilla de la estructura. Se relaciona como integrante del Estado Mayor del Frente de Guerra Oriental.
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En 2013 es responsable del Frente Domingo Laín Sáenz del ELN, y se conoció en 2014 que pertenecía a la estructura Héroes y Mártires del Frente Domingo Laín.
En 2015 se desempeñó como jefe de la Comisión Camilo Cienfuegos.
Para el año 2017 se convirtió en «jefe de inteligencia», según testimonio de un desmovilizado.
Medidas ante el atentado
Se ordenó los controles a la entrada y a la salida de las ciudades, la profundización del sistema de recompensas que en algún momento anunciaremos (…) también se tomaron medidas para buscar la extinción de bienes de estos delincuentes, la persecución a todas sus fuentes de financiamiento y el empleo de todas las herramientas.
Foto: Agencia
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