La cadena de producción traer costos tan elevados por los insumos importados que se necesitan para producir la carne, como lo es el caso de las proteínas
Foto: Agencias
La Guaira – La hiperinflación ha convertido los productos básicos de alimentación en todo un lujo. El costo de la vida se ha encarecido tanto, que incluso un ínfimo porcentaje de la población apenas puede consumir carne.
Precisamente, la carne es uno de los rubros cuyo precio se ha inflado más por la inflación desmedida que deteriora la economía del país.
Un ejemplo de esto es el hecho de que en el estado Vargas ya se vende el kilogramo de carne en dos millones de bolívares (Bs. 2.000.000). Aumentó de manera acelerada tras haber pasado la barrera de los Bs. 800.000 hace dos meses y luego llegar a Bs. 1.300.000 y 1.500.000 el kilo, según reseñó el diario La Verdad de Vargas.
Hoy se ubica en Bs. 2.000.000, al igual que en comercios de Maracaibo, estado Zulia, donde su valor oscila entre Bs. 1.500.000 y Bs. 1.800.000 para venderse en Bs. 2.000.000 o incluso más después de un eventual aumento salarial decretado por el presidente Nicolás Maduro este próximo martes 1 de mayo (Día del Trabajador).
“Aquí tratamos de mantener los precios porque en otros locales están más elevados. Ya la situación es crítica porque son pocas las personas que pueden llevarse un kilo, apenas compran 1 o 2 bistec porque eso es lo que le permite su presupuesto”, comentó un comerciante de carne en La Guaira, capital de la entidad varguense.
La cadena de producción trae costos muy elevados por los insumos importados que se necesitan para producir la carne, como lo es el caso de las proteínas. Los vendedores se las compran a los proveedores a un precio incrementado de entre 50% y 100% superior al costo de compra de ese proveedor para traerla al país.
Este es uno de los factores que inciden en el elevado precio final de la carne de res al consumidor.
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