Estuvo cerca de la historia

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El biatleta noruego Ole Einar Bjoerndalen, de 40 años, se quedó a un paso de convertirse en el deportista de la historia con más medallas en unos Juegos Olímpicos de Invierno al acabar cuarto en la prueba de 12,5 km de persecución.

Bjoerndalen, que participa en Sochi en sus sextos Juegos, igualó el pasado sábado el récord de medallas olímpicas de invierno que tenía su compatriota Bjorn Daehlie al ganar el oro en los 10 km esprín y sumar su 12ª presea (siete de oro, cuatro de plata y un bronce).

Este lunes, en los 12,5 km de persecución, Bjoerndalen era el máximo favorito al título, en una prueba en la que ya fue oro en Salt Lake City 2002 y cuatro veces campeón mundial, pero finalmente quedó fuera del podio en una prueba ganada por el francés Martin Fourcade.

Callando bocas

El noruego, apodado «El Caníbal», suma en su carrera 19 títulos mundiales y su rendimiento del sábado hizo callar a sus críticos, que ya le daban por acabado hace cuatro años. En Vancouver 2010, Bjoerndalen ganó un oro, pero fue en relevo y a algunos les supo a poco, después que en Salt Lake City cosechara cuatro títulos olímpicos.

«La vida es demasiado corta para darme por vencido. Siempre hay que seguir adelante. He tenido algunos años malos, con muchos problemas, pero mi motivación nunca fue un problema», explicó «El Caníbal», tras su victoria del sábado.

«Pude continuar y entrenarme día tras día. Eso era lo más importante y probablemente la razón por la que estoy hoy aquí», añadió. La del sábado «no sé si fue una de las más bellas victorias de mi carrera, pero sí una de las más importantes», reconoció el noruego con una tímida sonrisa.

Medallas por doquier

Esa medalla de oro olímpica suponía la séptima de su carrera, a las que hay que sumar otras cuatro de plata y una de bronce para un total de 12 preseas, las mismas que logró su compatriota Bjorn Daehlie, que logró ocho de oro y cuatro de plata en esquí de fondo entre 1992 y 1998.

Daehlie no tiene dudas de que su compatriota le superará: «Va a pulverizar mi récord», admitió en una entrevista al diario noruego VG. «Los otros no pensaban que el ‹viejo› de 40 años iba a ser capaz de esto. Lo que ha hecho es simplemente fantástico», dijo tras el triunfo de Bjoerndalen.

Aunque «falló» este lunes, a Bjoerndalen aún le quedan balas en la recámara para alcanzar el récord, ya que tiene previsto participar aún en al menos cuatro pruebas, cinco si finalmente toma parte del relevo mixto.