Por mucho que nos empeñemos en pensar que la homofobia es cosa del pasado, lo cierto es que todavía queda por ahí mucho fanático suelto afirmando que los gays son marionetas del mismo demonio. Es el caso de Larry Tomczak, un pastor evangélico cuya misión en la vida es proteger a los jóvenes de la supuesta propaganda homosexual contenida en la cultura pop.
En una diatriba publicada en el Christian Post, el tipo comentaba indignado que «Glee tiene cinco personajes gays. Los realities de buscar casa incluyen a gays y lesbianas. Modern Family tiene una familia gay. Ellen DeGeneres celebra su lesbianismo con la visita de Taylor Swift para atraer a chicas jóvenes».
Numerosas voces se han alzado para criticar a Tomczak, y entre ellas se encuentra la de la propia Ellen, quien afrontó el tema en su programa televisivo: «Ni siquiera entiendo qué significa ‹celebrar mi lesbianismo›, no estoy tratando de lavarle el cerebro a nadie (…) La única forma en que quiero influir al público es ayudándole a ser más amable y compasivo con los demás». ¡Bien dicho, Ellen!
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