El señor de los escándalos volvió a sus andanzas. A pesar de hablar poco sobre su sexualidad y alimentar los rumores, críticas y aseveraciones sobre su inclinación sexual, Miguel Bosé se convirtió en el centro de todas las miradas tras el último concierto que ha dado en México. No en vano, mientras cantaba, Bosé se acercó al guitarrista de su banda y le besó en la boca.
Aunque el beso apenas dura un segundo, ha sido suficiente para que lo recojan los informativos del país azteca. Ellos también destacan que en esta gira Bosé «luce un poco pasado de peso» y ha cambiado su pelo rapado por una coleta. En el momento de cantar «Amante Bandido» Miguel volvió a acercarse a su guitarrista para agarrarle la cara y cantar, de nuevo, muy cerca de su boca mientras decía: «pasión privada, adorado enemigo».
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